A lo largo de la historia, hemos confiado en una lista interminable de «amuletos mágicos» para protegernos: herraduras, tréboles de cuatro hojas, sahumerios de hierbas y, cómo olvidarlo, esa clásica pulsera roja que todos tuvimos alguna vez.
Pero aceptémoslo… aunque entrañables y llenos de mística, estos métodos son una cuestión de fe y no ofrecen garantías reales.
Por eso, junto a BBVA Seguros decidimos darle un giro a este concepto de protección, demostrando que cuidar lo que más valoramos puede ser simple, moderno y, sobre todo, real:
Con un par de mensajes por WhatsApp ya tenés el seguro que necesitás. Sí, así de fácil, sin invocar la suerte ni aprender hechizos.
